Lleva un procesador más veloz que su antepasado directo, pero la fórmula de este Sony Ericsson Xperia Arc S sigue siendo la misma que la del Xperia Arc. Volvemos a encontrarnos por tanto con un dispositivo Android bastante delgado y ligero (pese a su pantalla de 4,2 pulgadas) que remata su equipamiento con una decente cámara de 8 megapíxeles con sensor retroiluminado Exmor R.
Su memoria interna se queda algo corta a la hora de instalar aplicaciones y su compatibilidad con distintos formatos de vídeo es muy limitada, pero al menos viene acompañado de un cable adaptador para aprovechar su salida micro-HDMI.
Lucas Laó.- No entraba en los planes de QUESABESDE.COM probar un Xperia Arc S. Teniendo en cuenta que el Xperia Arc ya fue profundamente analizado por este medio en una comparativa y que apenas hay diferencias entre ambos modelos, casi que no merecía la pena. Pero a la postre ha resultado ser el último smartphone lanzado bajo el logotipo de la ya extinta Sony Ericsson, de ahí que hayamos aprovechado para realizar nuestra particular despedida a la "joint-venture" sueco-nipona.
En la práctica, eso sí, tampoco es que importe mucho si el logo de Sony viene o no acompañado de un segundo apellido. Y es que gran parte de la filosofía del recientemente presentado Sony Xperia S ya está presente en el modelo que nos ocupa en este análisis.
Delgadez con estilo propio
Como es cada vez más habitual en más y más smartphones, el Xperia Arc S apuesta por un grosor reducido casi a su mínima expresión, con unas dimensiones completas de 125 x 63 x 8,7 milímetros. La profundidad de la carcasa, eso sí, crece ligeramente en los bordes de ésta, pues la parte trasera del terminal está sutilmente curvada hacia dentro (es decir, es cóncava).
Sony Ericsson (que ya es lo mismo que decir Sony, insistimos) aporta así un poco de estilo propio al diseño del equipo. Lo mismo sucede con el perímetro plateado con efecto espejo o el aspecto del frontal, rematado con tres botones finos y alargados en la parte inferior (perfectos para quienes no quieran activar por error los clásicos iconos táctiles) y un acabado en el que casi no llegan a percibirse los bordes de la pantalla cuando está apagada.
La curvatura trasera también contribuye un poco a mejorar el agarre del dispositivo, bastante cómodo de sostener con una sola mano gracias a su peso de sólo 117 gramos. Esto compensa en parte la contrapartida que traen siempre consigo los smartphones con pantalla de gran tamaño: son algo difíciles de llevar en el bolsillo del pantalón. El Xperia Arc S, a pesar de sus medidas, no es una excepción a esta regla.
Por ahora, todo los pros y contras que hemos citado también estaban presentes en el Xperia Arc. La única diferencia entre ambos terminales a nivel de diseño está en que el Xperia Arc S cuenta con tres acabados más (además del plateado y el azul) en colores blanco, rosa y negro (como el de la unidad que hemos probado, cuya tapa trasera está teñida con un sutil degradado similar al que se conseguiría con un espray pulverizador).
Accesorios con autoarranque o funciones añadidas
Repasando el perímetro del Xperia Arc S encontramos sus conectores, algunos de los cuales pueden emplear una curiosa función para que se arranquen automáticamente aplicaciones en el teléfono al detectar el accesorio. Sucede con los que están en la parte superior de ambos laterales: la salida de audio de 3,5 milímetros (a la izquierda) y el puerto micro-USB (a la derecha).
Fuente: quesabesde.com