Una de las noticias que nos deja 2018 es que las compañías tecnológicas cuyas plataformas están siendo usadas a favor de la desinformación masiva han tomado conciencia, han comenzado a reconocer las barbaridades que se comparten y, en ese sentido, han empezado a luchar contra ello de forma activa.
En ese sentido, India es uno de los países donde la situación se ha recrudecido más, y es que, según informa BuzzFeed News, al menos 29 personas han sido asesinadas en 2018 a causa de bulos que les incriminaban sin que los hechos estuvieran demostrados y siendo en muchos casos inocentes. La gravedad de la situación no alcanza la del genocidio en Myanmar, donde Facebook ya ha reconocido responsabilidad, pero de igual forma es muy inquietante, porque además del país asiático, también se están produciendo ajusticiamientos populares en México.
En los últimos meses, WhatsApp ha demostrado una preocupación creciente sobre este tema, tanto por las muertes como por la desinformación política que podría estar cambiando el curso de las elecciones en los países en los que WhatsApp y sobre todo sus grupos se han hecho fuertes.
Por ello, en primer lugar, la compañía ha limitado el uso de los reenvíos. En segundo, ha celebrado un concurso con el que seleccionar a equipos que investigarán sobre noticias falsas en el contexto de la mensajería instantánea y redes sociales. El objetivo es entender mejor la idiosincrasia de la plataforma para luchar con herramientas más adecuadas.
Tras cambios menores en el servicio como limitar los reenvíos, ahora WhatsApp pasa a la acción en el "mundo real"
Sin embargo, como ahora veremos, en India no han esperado a que los resultados del estudio estén listos para pasar de nuevo a la acción, aunque hay quien discute la forma en que se ha hecho.
Anuncios en televisión que promueven compartir todo menos rumores
WhatsApp en India ha lanzado una campaña en vídeo (que se une a otras anteriores en radio) que llama a no compartir rumores que puedan incitar a manifestaciones de odio que en última instancia conduzcan a la violencia. En los anuncios que la compañía ha preparado, se observa el comportamiento de jóvenes estudiantes en contextos muy felices. Al final del vídeo la trama avanza y se pierde el tono idílico cuando alguien comparte un rumor de los que se está demostrando que generan reacciones negativas que pueden agravarse.
Los protagonistas actúan con conciencia y avisan a las personas que propagan los rumores de que eso no está bien y puede tener fuertes consecuencias. Sus acciones llevan a ver cómo se bloquea a los contactos nocivos, cómo los participantes salen de grupos proclives a compartir ese tipo de rumores o simplemente cómo se borra el contenido multimedia perjudicial.
La campaña, sin embargo, podría no ser tan efectiva como parece, pues los casos de asesinatos y linchamientos se están dando en regiones o municipios muy desfavorecidos económica y culturalmente, y los anuncios van dirigidos o toman como ejemplo a clase media con estudios universitarios, un perfil demográfico muy alejado en principio de la problemática. Quizá llegue a esa población, pero no a la objetivo, como señala en Twitter Pranav Dixit, reportero de Buzzfeed en India.